Concierto histórico de Residente
Este sábado 6 de septiembre, el público pudo disfrutar de Residente en el Zócalo capitalino, en un concierto cargado de ritmos urbanos, mensajes sociales y orgullo latinoamericano. La actuación fue organizada por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México y reunió a 180 mil asistentes, quienes presenciaron un espectáculo que combinó música, arte y resistencia.
Apertura con Mujer en Cypher
El evento fue iniciado por el colectivo Mujer en Cypher, conformado por Azuky, Arianna Puello, Ximbo, Niña Dioz, Prania Esponda y Mena. Sus versos, beats y rimas llenos de fuerza dieron inicio a la noche, destacando la resistencia y el empoderamiento femenino. Arianna Puello ofreció un mensaje de libertad y justicia, mientras Ximbo y Niña Dioz contagiaron al público con sus temas “No puedes parar” y “Mezcal”.
La llegada de Residente
En punto de las 20 horas, Residente apareció en el escenario y el Zócalo fue testigo de un estallido de euforia colectiva. Con canciones como “Baile de los pobres”, “No hay nadie como tú”, “Atrévete” y “Muerte en Hawái”, se logró una conexión especial con la multitud, mientras el público coreaba cada tema. Silvana Estrada se unió al rapero para interpretar juntos “Latinoamérica”, generando un momento de hermandad y celebración de la cultura latinoamericana.
Mensajes de igualdad y cultura
Antes de cerrar su presentación, Residente destacó la importancia de la igualdad de oportunidades y el acceso a la educación, agradeciendo al público su energía y entusiasmo. El concierto concluyó entre aplausos y gritos, consolidando al artista en la lista de figuras nacionales e internacionales que han llenado el emblemático Zócalo, como parte de la política cultural de la ciudad.
Público y ambiente festivo
Desde tempranas horas, personas de todas las edades llegaron al Centro Histórico con pancartas, banderas y camisetas de apoyo a Residente. Familias, amigos y fanáticos disfrutaron del evento en un ambiente festivo y pacífico, donde se vivió la música como un derecho cultural.
